miércoles, 31 de octubre de 2012

Concursos de arte con trampa y otras estafas.




Se me ha ocurrido hacer una lista de concursos trampa / estafa. Os remito a una entrada anterior, que publiqué en mi blog,  que habla de este asunto más extensamente "Más sobre concursos de pintura"

Resumiendo:

1º Aquellos concursos de pintura/escultura etc., que se paga por el simple hecho de participar.

2º Propuestas para participar y aparecer en libros de arte, que no se mira nadie y que se paga por salir en una página (seas un novato o un profesional), lo que se trata es de que pagues.

3º Aquellas exposiciones colectivas de dudosa credibilidad (que te hacen pagar por cuadro expuesto).

En fin, todas aquellas propuestas trampa en los que los beneficiados son los promotores a costa de los ingenuos artistas.  Os propongo ir haciendo la lista en esta entrada o en los comentarios:

Aquí va la primera:

Concurso FLORENCE-SHANGHAI PRIZE (Present Art Festival de Shanghai )

PREMIOS:

El jurado seleccionará obras para participar en una exposición en Present Art Festival de Shanghai 2013.Se podrá participar con cuatro, dos o una obra según  sea el 1º,2º o 3º premio. Además los ganadores de cada categoría pueden participar gratuitamente en una de las exposiciones colectivas en el Present Art Space de Florencia (No dice si la exposición es VIRTUAL o no)

También habrá 60 finalistas que (¡Gran premio!)se les publicará una obra en un catálogo y  podrán participar en una exposición VIRTUAL de Present Art Community.

LO MALO:
Hay que pagar 60 € (euros) a fondo perdido y sin devolución. Otra vez a pagar un concurso que con mucha probabilidad el artista no será seleccionado. Y los premios no es que sean para tirar cohetes. Otro concurso trampa para ganar dinero... pero no los artistas.

domingo, 21 de octubre de 2012

El arte contemporáneo ante el cambio de paradigma: la gallina.

Odio la prosa pseudofilosófica postmoderna. Ha sido leer "cambio de paradigma" y dejé, asqueado, este artículo.
 

A ver... Haré un esfuerzo y lo leo, Un momento. Quizá diga algo interesante, a pesar de todo.

Vale. Leído. Pues no, no me gusta, definitivamente. Viene a decir que "pobrecico el arte contemporáneo, ahora que hay crisis".

A mí me parece que si de algún lado sale todo el tinglado del arte contemporáneo (yo no lo llamaría sistema, que para mí es una palabra respetable que me trae a la memoria cosas chulas de ciencia), es precisamente, del tinglado aún mayor de los "mercados", que básicamente son las actividades de las oligarquías formadas por banca internacional, empresas transnacionales y grandes fortunas nacionales. O sea: los ricos de toda la vida.

Que ahora se estén vendiendo menos "cosas" contemporáneas (la palabra "obra de arte" me la reservo para otros usos) es sólo síntoma de que las oligarquías están ahora ocupadas extrayendo dinero del pueblo, como si fueran vampiros o algún tipo de ente estraterrestre capaz de sorber fuerza vital de los desprevenidos ciudadanos corrientes. Por lo tanto, andarse con pasatiempos como venderse entre ellos cagadas con lacitos (respetable costumbre francesa de antes de la Revolución de 1789) es algo que ahora mismo no viene a cuento. Mejor chupar, sorber y dejar seco al pueblo ahora que se ha abierto la veda. Cuando acaben con nosotros ya se preocuparán de volver a inventarse un pasatiempo. ¿Quizá el tráfico de niños en formol? Pues quien sabe, todo puede ser.

Es lógico que el director del Reina Sofía se preocupe por su futuro inmediato. Pero yo, al menos, tengo otros problemas.

miércoles, 17 de octubre de 2012

La confusión del arte contemporáneo

Maurizio Cattelan, denominado "Novecento", pero yo lo llamaría "¡Vaya putada!"


A raíz del artículo online de Avelina Lésper publicado en "Vanguardia",  "El arte contemporáneo es una farsa" y viendo la cantidad diversa de comentarios que han surgido me he permitido hacer algunas reflexiones sobre lo expuesto.

En realidad lo que dice Avelina es algo que está en la mente de mucha gente corriente de la calle, pero obviamente no creo que pretenda generalizarlo de manera absoluta. No todo es bueno, ni todo es absolutamente malo. Lo que ocurre y confunde a mi entender es que hablamos de arte a nivel general, cuando el arte tiene muchas vertientes: la pintura, la escultura, la música, el cine, la arquitectura, la ilustración, el teatro, la literatura, la poesía, y aun podríamos seguir. Del hecho de querer fusionar unas artes con otras radica una parte del problema. En el caso que tratamos, el de las artes plásticas, en la que podemos incluir  la pintura, la escultura, la fotografía, el dibujo o la ilustración, el grabado, en incluso la cerámica o la joyería, estamos metiendo en el mismo saco a las performances, vídeoarte e instalaciones y esto no lleva a nada bueno ya que se confunde al público y en el fondo se le engaña. Sin duda habrá muchas de estas representaciones que serán de calidad y otras que no, como ocurre en la pintura, pero dejemos las performances para los amantes de las performances, el vídeoarte para los amantes del vídeoarte y las instalaciones para los amantes de lo efímero y dejemos tranquilas a las artes plásticas en el lugar que le corresponden y para los aficionados y amantes que les corresponden.



Incluso en las mismas artes plásticas la exposiciones tendrían que ser bien diferenciadas. Mezclar dentro de la misma exposición obras fotográficas y obras  pictóricas me parece también un error ya que son artes que tienen unas diferencias muy grandes en cuanto a la manera de ser creadas e incluso en sus resultados plásticos. Es como si un espectador va al cine para ver una película y en vez de una película se representa una obra de teatro, obviamente se sentirá engañado. Creo que el espectador prefiere ver una exposición de pintura separadamente de una exposición fotográfica. Me decepciona muchas veces ver muchos concursos de pintura y exposiciones en los que parte de las obras son fotografías. ¡No fastidiemos! El pintor ha tenido que aprender el oficio de pintor y el fotógrafo el de fotógrafo.



Dicho esto creo que hay otra confusión al hablar de "Arte Contemporáneo" de una manera global como si fuese un término en sí mismo. Si nos atenemos a la definición de contemporáneo (lo que existe al mismo tiempo que algo tomado como referencia) nos damos cuenta que hablar de arte contemporáneo y englobar en él a todo el arte que se crea en una época o en un tiempo determinado (por ejemplo el arte de la actualidad) sería lo correcto. Todo el arte que se hace hoy en día es contemporáneo de cualquier otro arte que se haga hoy en día, por lo tanto no se puede llamar arte contemporáneo solamente al arte transgresor, a las performances, al vídeoarte, a las instalaciones, etc., sino que también los cuadros "clásicos" pintados hoy en día son arte contemporáneo. Así pues,  aunque parezca una obviedad, no se puede afirmar que el arte contemporáneo es "un falso arte", ni que "carezca de rigor", ni que le "falte inteligencia", sino que hay un tipo de "arte" actual y pasado de rosca que no tiene estas cualidades éticas y estéticas que debería tener el verdadero arte. Y aquí es donde se utiliza aquello tan vulgar de "sobre gustos no hay nada escrito", aunque yo creo que sí hay mucho escrito pues si una obra no contiene creatividad, inteligencia, armonía, y una bella composición estética carece de buen gusto y deja de ser una obra de arte. Pero si alguien quiere torturarse con esas cosas que no llegan al alma y creerse que por ello es más inteligente y "moderno" que los demás allá él con su conciencia. 

Resumiendo, yo cambiaría el sentido que se le da al término "Arte contemporáneo" por su verdadero significado, es decir, arte existente en la actualidad  y pasaría a llamar a estas llamadas "artes" con un simple y poco original nombre: "Ocurrencias contemporáneas". 


lunes, 1 de octubre de 2012

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